Con el auge de los usos y aplicaciones de la IA, detectar contenido creado por Inteligencia Artificial se ha convertido en el reto de muchos. Tanto es así que existen diversas herramientas para detectar este tipo de contenidos así como estrategias que podemos utilizar.

A medida que la IA se perfecciona, imitando cada vez más estrechamente el estilo y la complejidad del contenido humano, surge una necesidad crítica: la habilidad de discernir entre lo genuino y lo artificial.

Como ocurre con toda innovación tecnológica, todo descubrimiento o invención en sí, siempre hay quienes están a favor y quienes no tanto. En este sentido, la Inteligencia Artificial despierta debates y opiniones sinfín sobre si es realmente una herramienta valiosa o no, que si quitará puestos de trabajo a personas al no necesitarlas, que si se puede optimizar el trabajo, etc.

Este artículo profundiza en la intrincada red de la generación de contenido por IA, destacando métodos para su identificación y reflexionando sobre las implicaciones éticas de esta tecnología emergente.

Nueva frontera en la generación de contenido

La Inteligencia Artificial ahora se sitúa en el epicentro de la producción de contenido. A través de modelos de lenguaje avanzados, la IA puede emular estilos de escritura, integrar información clave y producir contenido a una escala y velocidad que desafía las capacidades humanas. Dos de esos modelos son GPT y Bard, ¿cuáles son las diferencias entre GPT y Bard? Uno genera contenido más general y otro de manera más específica. 

Sin embargo, detectar contenido creado por Inteligencia Artificial requiere de aspectos esenciales que hay que tener en cuenta. Esta innovación no está exenta de fallos; la falta de empatía, la comprensión contextual y las conexiones emocionales genuinas son barreras que la IA aún tiene que superar.

Estrategias de detención

Además de herramientas para detectar contenido creado por Inteligencia Artificial, podemos utilizar estrategias para desenmascarar tales contenidos.  El contenido generado por IA lleva consigo huellas digitales sutiles. Desde la sobreutilización de palabras clave hasta la generación de frases sin sentido en un intento de emular la creatividad humana.

La coherencia emocional, las transiciones lógicas y la originalidad son aspectos que las máquinas aún no replican con total precisión, proporcionando un terreno fértil para el análisis crítico y la detección.

Por ejemplo, en el caso de necesitar un contenido escrito en español de España, podemos encontrar palabras que nos den pistas sobre quién o qué ha generado el contenido. La palabra “piso” en vez de “suelo”; “en línea”, en vez de “online”, etc. Por supuesto, habrá que ver el contexto del contenido y dónde se publica.

Hay ocasiones en que la IA genera contenidos en el que los títulos o subtítulos, por ejemplo, tienen cada palabra con la primera letra en mayúscula. Por ejemplo: “Mirando Hacia el Futuro: La Coexistencia de Humanos e IA”. Otra manera de detectar contenido creado con Inteligencia Artificial es comprobar que no haya patrones o frases repetidas en un mismo párrafo, por ejemplo.

Frente a la sofisticación de la IA, han surgido herramientas diseñadas para contrarrestar y detectar contenido creado por Inteligencia Artificial. Algunas de las herramientas son:

• CheckGPT
• Turnitin
• OpenAI
• Copyleaks
• Crossplag

Estas herramientas emplean algoritmos de aprendizaje profundo para identificar contenido generado por IA. De manera que analizan el texto en busca de inconsistencias, sobre-repetición de frases y anomalías en el estilo o el tono.

Todo esto hay que tenerlo en cuenta junto con, como mencionamos en líneas anteriores, el contexto del contenido, el tipo de contenido (el tono puede resultarnos extraño pero atendiendo al tipo de contenido puede que sea coherente), el país en el que se publica y el medio en el que lo estamos leyendo, entre otros.

Consideraciones éticas

Igual que adelantábamos al principio, la IA ha generado tantos debates y opiniones que los hay de todas las clases. Entre estos debates se encuentra la ética y dilemas profundos al respecto, así que te dejamos estas dos preguntas que dan un poco que pensar.

¿Quién es el verdadero autor de un artículo generado por IA? ¿Cómo gestionamos los derechos de autor, la credibilidad y la responsabilidad?

La evolución de la IA es imparable, y su presencia en la generación de contenido solo se intensificará. Aprender a detectar contenido creado por Inteligencia Artificial y validarlo es esencial, pero igualmente importante es contemplar cómo humanos e IA pueden coexistir en este espacio.

La educación, la adaptación y la regulación jugarán roles fundamentales en la configuración de un futuro donde la IA no solo se detecte sino que se utilice de manera efectiva y ética. En Indexando Marketing trabajamos día a día con herramientas para llevar a cabo estrategias de SEO eficientes.

Para ello, nos mantenemos actualizados de las innovaciones, usos e implicaciones de los diferentes campos de la Inteligencia Artificial. Todo para poder asesorar a nuestros potenciales clientes ofreciéndoles la mejor experiencia y todos nuestros conocimientos. Contacta con nosotros para hacer una auditoría de marketing y conocer todas tus posibilidades.