SEO

Cómo hacer un auditoría de tu contenido

Tania Lorenzo

El primer paso para refrescar un contenido SEO para optimizarlo es detectar cuáles de tus textos necesitan una actualización. Para ello, debes hacer una auditoría de tu contenido centrándote en los puntos de mejora óptimos para alcanzar tus objetivos.

El objetivo de las auditorías de contenido es establecer prioridades, decidir qué necesita ser actualizado y en qué orden.

Aunque todo depende de lo que pretendas lograr con tus contenidos generalmente la prioridad principal será la de mejorar los artículos en los que se haya disminuido la tasa de conversión, especialmente si estos conservan su posicionamiento y tráfico. ¿Por qué? Porque esta disminución de las conversiones es una evidencia de que hay algo mal con los contenidos, en el sentido de que están perdiendo su capacidad de persuadir al usuario de que realice la acción que buscamos conseguir con el contenido. Al final, en la gran mayoría de los casos el objetivo de los contenidos de calidad es vender

Otro punto al que prestar atención cuando haces una auditoria de tu contenido es a la disminución de tráfico y, por último, también debes centrarte en aquellos artículos que hayan perdido posicionamiento orgánico o en aquellos que no hayan logrado los objetivos deseados.

Siendo un poco más específicos, también puedes fijarte en métricas más concretas en función de la intención de tu artículo. Ahí van algunas claves:

  1. Para los artículos genéricos centrados en la atracción de tráfico: Céntrate en aquellos que hayan perdido posicionamiento orgánico o directamente no estén posicionando bien. También es importante actualizar aquellos que están perdiendo tráfico.
  2. Para artículos centrados en trabajar el reconocimiento de marca o busquen dar a conocer productos o servicios: Céntrate en aquellos en los que se haya reducido la tasa de participación o en los que se hayan disminuido los clics en las páginas de destino o las tasas de conversión en las llamadas a la acción.
  3. Para los artículos centrados en la conversión o los propios textos de productos: Fíjate en la disminución de las ventas, las reservas o las suscripciones.

Otra forma de detectar textos que pueden beneficiarse enormemente de una actualización en centrarte en localizar y priorizar dos tipos de contenidos:

  1. Viejas glorias: Contenidos antiguos que han funcionado bastante bien en el pasado y siguen siendo relevantes para tu audiencia y estrategia de negocio pero han ido perdiendo actualidad y tienen margen de mejora.
  2. Nuevas promesas: Contenido de alta calidad alineado con tu estrategia de negocio que no ha llegado a ser descubierto por tu audiencia o que no ha obtenido los objetivos deseados.

Hacer una una auditoría de tu contenido es fundamental para detectar realmente qué artículos tienen posibilidades de mejora. Actualizar por actualizar no tiene sentido, necesitas utilizar una estrategia apoyada en datos si de verdad quieres que tus esfuerzos sirvan de algo.